Centro de Perisic al primer palo que bloca Allison. Lo que más chirría es su color rosa pero, según sus diseñadores, tienen una explicación. Era la camiseta que lució el Inter de Milán que lo había ganado todo la temporada anterior, derrotando al Bayern en la final de Champions en el Bernabéu (2-0) y volviendo a reinar en Europa 45 años después. Creo que fue un movimiento financiero y económico antes que deportivo porque estos clubes han sufrido pérdidas colosales en el último año y han intentado crear un jardín privado en el que explotar el potencial de la marca de sus equipos para hacer negocio.